El viaje de una gota de agua desde el cielo hasta el suelo

Hoy dejo algo escrito por mí, una redacción que mi profesor de Lengua me mandó escribir, me costó hacerla y ya que sólo se la pidió a unos cuantos y no me tocó; pues la cuelgo aquí :)

El tema: El viaje de una gota de agua desde el cielo hasta el suelo

Tenía miedo, ya no existía la vuelta atrás, nunca volvería a aquella acogedora nube blanca en la que tanto tiempo viví; tenía que crecer, avanzar, prosperar, debía salir de allí para no regresar jamás.

No sabía lo que me esperaba, qué sucedería después, que encontraría abajo, pero nada de eso importaba, estaba decidida, pensaba descender hasta llegar al suelo sin mirar atrás.

No era la gota más atrevida, ni mucho menos, por lo que aquel viaje que iba a comenzar resultaría duro sin lugar a dudas; por ello me alié con un grupo de gotas más, que también emprendían su camino hacia el suelo. Me prepararon para emprender el viaje, me enseñaron todo lo que se sabía del él, que en verdad, no era mucho.

Resulta curioso como la mayoría de las gotas allá arriba quieren bajar al suelo sin saber qué acontece allá , si ninguna gota vuelve a la nube de nuevo algún motivo existirá, es lo que deben pensar todas.

Por fin llegó el esperado día, el viaje se disponía a comenzar, en la nube el ambiente se notaba enrarecido, volvíamos la vista atrás sin saber qué ocurriría con las gotas que allí quedaban, un sentimiento de nerviosismo se apoderaba de mí y sin ni siquiera respirar me dispuse a saltar, y salté.

Salté con los ojos cerrados, un halo de pánico me impedía abrirlos, aunque me sentía mejor que nunca, flotaba, ¡estaba flotando!, no podía dejar de decirlo, lo gritaba una y otra vez, cada vez más fuerte que la anterior.

¡Menuda sensación! Si puedo decir que alguna vez me sentí libre, sin duda destaco aquella situación, notando cómo era el aire quién decidía mi camino.

Una agradable sensación recorría mi cuerpo por lo que abrí los ojos, quería ver cómo me acercaba a mi destino, quería ver mi nuevo hogar, pero…el miedo volvió a apoderarse de mí.

¿Y si aquello no era lo que esperaba? Nadie me explicó qué debía realizar al llegar al suelo, ¿y si mi destino estaba en aquella nube blanca que dejé? Nadie me explicó tampoco qué debía construir si quería volver al cielo.

Dejé de pensar, y me centré en mirar mi nuevo mundo, cada vez veía el suelo más cerca, sí, mi sueño se volvía realidad, tenía una nueva vida por delante que no podía dejar pasar, y para disfrutarla desde el primer momento debía abandonar todos mis temores.

Poco faltaba ya para tocar suelo firme, y yo sin saber que aquel sería mi final.

La emoción me embriagaba, se apoderaba de mí, y al final llegué al suelo… y desaparecí.

El suelo que encontré me acogió con alegría, como si me esperaran desde hace tiempo, como si supieran que llegaría

Tanto tiempo soñando con llegar al suelo… y ya estaba allí, en mi suelo particular, un suelo verde, lleno de árboles, flores y niños jugando.

Desaparecí como gota, sí, pero no me importó, había estado mucho tiempo formando parte del Cielo, y ahora tocaba formar parte de la Tierra.

[Sonando: Hoy publico sin música, estoy en clase]